Llevo un poco más de un mes en mi práctica, estoy en una clínica veterinaria, si bien para muchos es extraño imaginar lo que hago allí, ya que estudié marketing y no medicina; bueno para mi también lo fue en un principio. Incluso debo reconocer que los primero días de trabajo me sentía extraño, llegue a discutir con la doctora que me llevo a la clínica, pero ya ha pasado el tiempo, me interioricé más en lo que yo podía realizar, los cambios que podía ejecutar y como debía hacerlos.
Pude sentir la emoción de que mis ideas eran bien recibidas, y que mejor aún se estaban ejecutando, quizás para muchos no tiene significado correr muebles, cambiar la iluminación u ordenar una vitrina. Pero va más allá, por lo menos para mí, es ver que mis ideas ya no dejan de serlo y pasan a concretarse, poder ver mis diseños de afiches publicados en la recepción, como mis ideas están plasmada en las páginas de Internet de la clínica.
Lo que ahora me complica es que, necesito crear, pero en ocasiones me falta algo…¿será inspiración?, yo creo que si. Y es una lucha constante, una lucha que me agrada, que es un desafío conmigo mismo.
Debo dar gracias a Dios por esta fuerza, por este desafío y por quien ahora me acompaña.
No seré Andy Warhol, ni Walt Disney, pero sé que puedo hacer las cosas bien y aunque con tan solo cartón, mica, power point y ganas se puede hacer mucho.
Lo que ahora me complica es que, necesito crear, pero en ocasiones me falta algo…¿será inspiración?, yo creo que si. Y es una lucha constante, una lucha que me agrada, que es un desafío conmigo mismo.
Debo dar gracias a Dios por esta fuerza, por este desafío y por quien ahora me acompaña.
No seré Andy Warhol, ni Walt Disney, pero sé que puedo hacer las cosas bien y aunque con tan solo cartón, mica, power point y ganas se puede hacer mucho.
